Friday 12 August 2011

Ice, Ice, baby.

Voy a empezar por decir que soy consciente de cómo me perciben ciertas personas. Y de que, aunque parezca mentira, no me alegra la desgracia ajena.

Ayer, mi hermana me llama por el interno en la oficina, y me avisa que se tiene que ir porque su hija, Florencia, estaba internada en el Italiano. Le dije que no había problema, obvio, que vaya tranquila y que me avise cómo estaba. Lo primero que se me cruzó por la cabeza fue 'crap, una persona menos. Y con todo el trabajo que hay!'.

Extrañamente, sentí la necesidad de contarle a mi mamá. Enseguida se puso mal, cortó el telefono y la llamo a mi hermana. Al cabo de media hora, me llamó a mi con un update: 'tu hermana está re mal, no saben qué es lo que tiene Flor, después llamala'. Y, de nuevo, lo primero que pensé fue 'no tengo tiempo para llamarla'.

Cabe aclarar que las relaciones en mi familia son por demás disfuncionales; mi mamá no se lleva bien con mi hermana ni con su hija - a la cual se rehúsa a llamarla 'nieta', yo me llevo de una manera cordial con mi hermana y ni me hablo con mi sobrina. No estamos peleadas, simplemente no siento nada por ella y no tengo relación. Period.

En fin, como decía, apenas mi madre se enteró de esta extrema desgracia (sarcasm à la Sheldon), entró en modo 'mama bear'. Y yo...no. Si hay algo que no soporto es el caretaje. Es la falsedad. Es el pretender que alguien te importa cuando, en realidad, prefería estar en tu casa viendo How I Met Your Mother. Y le dije exactamente eso a mi mamá: que todo bien con mi hermana y la hija, pero que no me sale ser falsa. Y que tampoco quiero serlo.

Una pensaría que le dije que me estaba convirtiendo en Guevarista y me iba a vivir a Colombia con las FARC. Que no puedo ser tan fría, tan calculadora, que no puedo ser insensible, que esa no es la hija que crió...y blah. Newsflash, mother, cuando tu marido estaba enfermo, nadie te ayudó en nada. Cuando quien escribe estuvo mal, nadie ayudó en nada. Y no digo que esté mal, solo llamo las cosas por su nombre.

Mientras iba pasando todo esto, empecé a dudar. Soy realmente tan fría? Acaso la imagen que proyecto es de un robot que toma sus decisiones de una manera calculadora, basándome en el raciocinio y no en la emoción? Acaso me ven como alguien que no siente nada y esta muerta por dentro? Por mas que todos nos llenemos la boca diciendo que nos cagamos en el resto, no siempre es así. Ningun hombre es una isla, aunque le pese a Hugh Grant. No soy Bloody Ibiza.


Tras un breve soul searching, llegué a la conclusión de que no, no estoy hecha de hielo. Siento las cosas, hay situaciones que me hieren y también hay personas que me lastimaron y mucho. Pero that's life. A veces hay momentos lindos, otras momentos feos, y nosotros estamos along for the ride. La clave es no perderse. O, a lo sumo, saber encontrarse.

No me sale ser falsa. Mejor dicho, me sale, pero ya no quiero serlo. Pase muchos años de mi incipiente vida junto a gente que no me hacía muy bien, y qué gane? Absolutamente nada. Entonces, what's the point? Si de chiquitos nos taladran la cabeza con que la vida es corta y hay que aprovecharla al máximo, realmente vale la pena pasar esos preciados años junto a gente que no elegirías? Y por qué tengo que priorizar a esas personas? Prefiero estar con aquellas que me hacen bien, que me hacen reír, que están ahí para mi, que me escuchan y, mas importante...que elegí.

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