Hace un par de días, la gente copada y ¨über cool de Tienda Kitsch me mandó un Chanchito Parlante. Al principio, no sabía qué esperar. Pero apenas lo ví, me morí de la ternura.
'Bueno, hay que probarlo', pensé. Honestamente, no apostaba mucho por el producto. Pero el chanchito, al que bautizamos con mis amigas como Piggly Wiggly Roo, me calló demostrándome que no solo es muy práctico, sino que se escucha bárbaro. Se conecta al Ipod sin problemas, y si quiero escuchar la radio, solo tengo que enchufarlo a la computadora y listo. Encima, al ser chiquito, no ocupa mucho lugar. Ganamos todos!
Por más que le pese a mi papá, que dice que no va con la estética de mi oficina, este divino chanchito es mi fiel compañero de escritorio.
La gente de Tienda Kitsch se pasó: este porcinito tierno es a keeper. Asique, si pueden, busquen uno. No saben dónde? Visiten la página de Tienda Kitsch. Tienen la posta.
Posta.
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