A veces me olvido de las cosas que me molestan y sigo con mi vida. Me levanto, me lavo los dientes, me pongo las lentes, Ray-Ban y a combatir el dia. Voy through the motions, y cada vez voy pensando menos en lo que me molesta.
Pero no lo supero. No hice el duelo todavía. La herida sigue ahí, latente, esperando a que la vuelva a ver para tirar del corazón y ponerme triste. Puede ser masoquista, puede que no, pero es la manera que conozco, la única que, medio a los ponchazos, me resultó hasta ahora. Y no tengo ganas de cambiar, por vos, ni por ella, por nada ni nadie.
Hoy, me acordé de qué era lo que me estaba molestando.
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