Friday 29 January 2010

Lucha de Gigantes (part deux)

Anoche me puse a pensar por qué seguí siendo amiga de mis amigos. O mejor dicho, de algunos amigos. Acaso realmente el corazón extraña a aquellos que se fueron? O mi mente, por inercia, le dice que tiene que extrañar?

Siempre mantuve relaciones que ya no funcionaban por miedo a cortar algo antes de tiempo y arrepentirme una vez que todo ya tuviese un punto final. Pero qué pasa cuando los demás se olvidan, te cambian, te mienten a la cara, son hipócritas y falsos? Pasa que ya no te interesa todo aquello que no suma.

Entonces te preparás para quemar otro puente. Pero todo bien con esa gente que quedó del otro lado, igual; las personas cambian. Y no hay por qué recriminarse nada. Se fueron en direcciones opuestas y ya lo único que tienen en comun es un pasado lleno de recuerdos que todavía, por momentos, te hacen sonreir.

Y eso te hace sonreir, mientras prendés un fósforo y te agachás para iniciar el fuego que va a liberarte de una mochila que hace rato te viene pesando, y bastante.

Ahora, a seguir mirando para adelante.
 
(This is the last string to sever)

No comments:

Post a Comment